Mar
martes, 14 de julio de 2009
Ganas de lluvia
Cuando el aire me diga cuántas caricias ha impedido
y el fuego me confiese de cuántas bocas se ha alejado,
cuando el agua grite el número de sirenas muertas
y la tierra confiese lo que esconde en sus entrañas
entonces yo podré explicar estas ganas de llover,
de empaparme y no de amor.
Cuando el mar hable sin va-y-vienes
y se quite su disfraz de espuma,
cuando el desierto rinda cuentas
del número de barcos que posee
entonces yo podré explicar la necesidad de los paraguas,
no de arena ni espejismos.
Cuando el piso explique su dureza
y el cielo diga qué crimen han cometido las estrellas
y qué tan larga es su sentencia
entonces yo podré explicar las nubes
y su no tan repentino oscurecimiento.
Cuando alguien diga, de una vez por todas,
por qué la luna esta partida, rota y desalmada
entonces yo podré explicar la lluvia
no de amor sino de sal
(la ultrajada,
la robada por el mar)
Etiquetas:
de cosas que una cree que tiene que explicar,
lluvia,
mar,
sal
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Hola como estas?La verdad hermoso tu blog me encantò lo que escribìs.
ResponderEliminarTe cuento que podès pasar cuando quieras por el mio...donde cuento la historia de amor que vivo dia a dia con mi novia "sirena"....te mando un abrazo grande y voy a seguir siempre tu blog.
Cariños